Los secretos ocultos del Bismarck: El terror naval de la II Guerra

Los secretos ocultos del Bismarck: El terror naval de la II Guerra

Si eres uno de los apasionados de la historia que ya ha iniciado la emocionante colección del Bismarck armable de Editorial Salvat, estás a punto de adentrarte en un viaje fascinante a través de los secretos ocultos de uno de los acorazados más temibles de la Segunda Guerra Mundial. 


A medida que ensamblas cada pieza, es importante conocer algunos detalles no tan conocidos que rodearon al Bismarck y que rara vez se discuten.


Defectos de diseño 


 A pesar de su imponente apariencia, el Bismarck tenía defectos de diseño que finalmente contribuyeron a su hundimiento. 


Uno de estos fue su sistema de control de incendios, que resultó ser demasiado complejo y difícil de utilizar en combate. 


Además, su blindaje, aunque robusto, no era tan resistente como se creía, dejándolo vulnerable a los ataques enemigos.


El secreto del cañón oculto


 Entre los misterios más intrigantes del Bismarck se encuentra su cañón secreto de 150 mm de calibre, ubicado en la cubierta de la popa. 


Aunque nunca se utilizó en combate, se cree que estaba destinado a sorprender a los buques enemigos que se encontraban detrás del Bismarck, en caso de un ataque sorpresa desde la retaguardia.


Poderío desde el nombre 

El acorazado Bismarck fue nombrado en honor del canciller Otto von Bismarck, que fue un estadista alemán que fue fundamental en la unificación de Alemania en 1871. 

Bismarck fue un líder militar y político respetado, y su nombre era sinónimo de poder y fuerza.

El nombre del Bismarck fue elegido por el almirante Erich Raeder, comandante en jefe de la Kriegsmarine. Raeder esperaba que el acorazado llevase el nombre de Bismarck y que inspirara a la tripulación a luchar con valor y determinación.


El enigma del cargamento de oro


 Una parte intrigante de la historia del Bismarck es el supuesto cargamento secreto de oro a bordo. 


Este oro estaba destinado a financiar operaciones secretas alemanas en el extranjero, pero su destino sigue siendo un misterio. 


¿Fue hundido junto con el Bismarck o pudo haber sido recuperado por submarinos alemanes después del hundimiento?



Veloz y letal 

El Bismarck era de la clase acorazado de bolsillo, lo que significa que era un barco relativamente pequeño, pero con un armamento poderoso. 

Los acorazados de bolsillo fueron diseñados para atacar barcos mercantes y cruceros ligeros, y para escapar de los acorazados más grandes.

El Bismarck era el buque insignia de su clase, y era el acorazado de bolsillo más grande y poderoso jamás construido. Tenía un desplazamiento de 41.700 toneladas, una velocidad máxima de 30 nudos y un armamento de ocho cañones de 380 mm.


La influencia del Bismarck 


El Bismarck fue un barco revolucionario en su época, y su influencia se extendió mucho más allá de su hundimiento en 1941. 


El acorazado fue un factor importante en el desarrollo de los acorazados posteriores, tanto en Alemania como en otros países.


Por ejemplo, los acorazados británicos de la clase King George V se diseñaron en respuesta al Bismarck. 


Estos acorazados eran más grandes y más fuertemente armados que sus predecesores, y también estaban equipados con un sistema de control de incendios más avanzado.


Datos de guerra del Bismarck 


El acorazado fue hundido en el Atlántico Norte en mayo de 1941, después de una batalla de tres días con la Royal Navy británica.


Aquí hay algunos datos trágicos del Bismarck:


  • El Bismarck sólo estuvo en servicio durante ocho meses antes de ser hundido.
  • El hundimiento del Bismarck resultó en la muerte de 2.200 miembros de su tripulación.
  • El Bismarck fue hundido por un ataque combinado de barcos y aviones británicos.
  • El hundimiento del Bismarck fue un revés importante para la Kriegsmarine alemana.

El hundimiento del Bismarck fue un acontecimiento importante en la Segunda Guerra Mundial. 


El acorazado era un símbolo del poderío alemán, y su hundimiento fue un golpe de moral para los alemanes. El hundimiento también demostró la superioridad de la Royal Navy británica.




El ataque del submarino británico

 El hundimiento del Bismarck involucró un ataque sorpresa de un submarino británico, el HMS Trident. 


Aunque los torpedos disparados por el submarino no lograron hundir al acorazado, dañaron críticamente su timón, lo que lo dejó inmanejable y vulnerable al posterior asedio de la flota británica.


Si aún no has comenzado tu colección del Bismarck armable de Editorial Salvat, esperamos que este artículo te motive a emprender la travesía del coleccionismo.  


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